Ocurre todos los años. Tras una Navidad repletita de excesos, en la que hemos comido y bebido por encima de nuestras posibilidades, llega el 1 de enero y, con el Año Nuevo, llenamos la mochila de nuevos propósitos. Que si apuntarnos a clases para mejorar nuestro inglés, que si dejar de fumar, o el ya clásico
Utilizamos cookies propias y de terceros para mejorar nuestros servicios y obtener datos estadísticos. Si continúa navegando, consideramos que acepta el uso de las cookies que se instalarán en su navegador. Si lo desea puede obtener Más información.