Y como la Semana Santa en casa empezaba con una buena fuente de natillas caseras, eso sí, siempre con galletas, eso de hacerlas sin nada, no tenía ninguna gracia.
Algunos años incluso mi madre las hizo sin azúcar... Para comer más sin tanto remordimiento, coqueta ha sido siempre.
Pues aquí os dejo mis natillas de vainilla, suaves, con un intenso sabor y que, en su momento, gustaron y mucho a todos, sobre todo a ella, a mi madre.
* Necesitamos:
- 500 gr de leche
- una cucharadita de maizena
- 2 huevos
- 80 gr de azúcar
- corteza de naranja o limón
- un palo de canela
- una vaina de vainilla
- galletas