Ingredientes para un molde de 24 cms de diámetro :

• Para la base:
• 250 grs de galletas digestive
• 150 grs de mantequilla derretida
• 1 cucharada de crema de chocolate (Nocilla, Nutella o marca blanca)
• 25 grs de avellanas tostadas picadas muy finas
• Para el relleno:
• 500 grs de queso mascarpone
• 20 grs de azúcar glas
• 400 grs de crema de chocolate (Nocilla, Nutella o marca blanca)
• 1 chorro de whisky (opcional)
• Para la decoración:
  
• Avellanas tostadas picadas
• Azúcar glas para espolvorear

¿Tenéis 30 minutos? Pues entonces tenéis una tarta de chocolate sencilla y rápida. Si no tenéis mucho tiempo y queréis hacer un postre que no requiera mucha complicación, ésta es tu receta. La idea original es del cocinero vasco David de Jorge o “Robin Food”. Ya la he elaborado tres o cuatro veces y es todo un éxito y gusta tanto a pequeños como a mayores.

Elaboración:

Primero preparamos la base de la tarta. Picamos finamente las avellanas con un robot de cocina o picadora hasta casi hacerlas polvo. Reservamos. Por otro lado, trituramos las galletas digestive y las ponemos en un bol. Yo siempre uso las tipo digestive porque me encantan pero podéis usar otras galletas como las tipo María. Añadimos la mantequilla derretida, las avellanas picadas y la cucharada de crema de chocolate y mezclamos hasta que todo esté bien integrado.

Colocamos esta masa en la base y laterales del molde apretando con los dedos para cubrirlo bien todo y dejarlo lo más liso posible. Podemos meter el molde en la nevera para que se vaya asentando mientras preparamos el relleno.

En un bol grande, echamos el queso mascarpone y batimos con un batidor de mano hasta que quede cremoso. Ahora agregamos el azúcar, la crema de chocolate y el chorrito de whisky y mezclamos hasta obtener una crema uniforme.

Sacamos el molde de la nevera y vertemos esta crema de queso y chocolate sobre la base de galletas y alisamos la superficie. Para decorar, podemos poner más avellanas picadas por encima y espolvorear con azúcar glas para que quede bonito. También podemos poner cacao puro en polvo sin azúcar Valor.

Volvemos a meter la tarta en la nevera para que repose hasta que se vaya a consumir. Acordaos de taparla con film transparente para que no coja olores raros en la nevera. Esta tarta tonta de chocolate, que la hace cualquier niño, es una opción rápida para sorprender a alguien o para darte un capricho tú mismo… jeje…